La Organización Internacional del Trabajo (OIT en castellano o ILO en inglés), que en 2019 celebra su centenario, es una agencia de las Naciones Unidas que se ocupa de los asuntos relativos al trabajo y las relaciones laborales. Fue fundada el 11 de abril de 1919, en virtud del Tratado de Versalles. La OIT tiene un órgano de gobierno integrado por los representantes de 187 gobiernos, los representantes de los trabajadores y los representantes de los empresarios. A pesar de ser un organismo supranacional, no tiene potestad para sancionar a los gobiernos, que deciden las políticas y las leyes que rigen las relaciones laborales. Sin embargo, la OIT sí tiene la capacidad de estudiar, informar y recomendar actuaciones encaminadas a conseguir su gran objetivo: el trabajo decente.
Informe de la Comisión Mundial sobre el Futuro del Trabajo
Este año, la Organización Internacional del Trabajo celebra su centenario reivindicando los logros obtenidos durante estas 10 décadas y reafirmando su posición como organización mundial con autoridad en el mundo laboral. A lo largo del año tendrán lugar numerosos eventos conmemorativos en todo el mundo, comenzando por la presentación del Informe de la Comisión Mundial sobre el Futuro del Trabajo, que tendrá lugar el 22 de enero. Este documento recogerá las conclusiones de tres años de trabajo y de dialogo en los estados miembros de la OIT sobre los retos que plantea conseguir condiciones de trabajo decente y sostenible para todos.
En junio, la Conferencia Internacional del Trabajo discutirá dicho informe y adoptará nuevas normas históricas para combatir la violencia y el acoso en el mundo del trabajo, algunos de los problemas que necesitan solución si se quiere conseguir el objetivo fundamental de tener un trabajo decente.
Unos meses antes, en abril, 24 países de todo el mundo realizarán un Recorrido Mundial de 24 horas en directo, con eventos, coincidiendo con el centenario de la sesión plenaria que en 1919 adoptó el proyecto de Constitución de la OIT.
Pero más allá de los actos conmemorativos, la Organización Mundial del Trabajo quiere que su centenario pase a la historia por el desarrollo de iniciativas que mejoren las condiciones del trabajo en todo el mundo. Este proyecto, conocido como las Siete iniciativas del Centenario tiene por delante una serie de retos que pueden transformar la capacidad de desarrollo económico y social del trabajo, como arma para relegar al pasado la pobreza y la injusticia en el mundo. Las iniciativas del Centenario son:
1. El futuro del trabajo
Desde su fundación la OIT ha trabajado para desarrollar relaciones laborales justas y beneficiosas para todos los interlocutores del diálogo, pero el nuevo milenio ha traído cambios sustanciales que han provocado un entorno laboral completamente diferente. La OIT necesita entender los nuevos desafíos y aportar respuestas y soluciones a los nuevos conflictos laborales. La creación de la Comisión Mundial sobre el Futuro del Trabajo en agosto de 2017 marcó el inicio de la segunda fase de la iniciativa del centenario de la OIT relativa al futuro del trabajo. Los grupos de trabajo se centrarán en debatir y presentar soluciones que favorezcan la seguridad, igualdad y prosperidad.
2. Poner fin a la pobreza
Otro de los grandes objetivos es poner fin a la pobreza en el mundo a través del desarrollo sostenible. Entre los acuerdos está luchar por el Programa de Trabajo Decente, firmemente incorporado en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Este programa quiere promover el crecimiento económico inclusivo y sostenible, el empleo y el trabajo decente para todos.
Para llegar a conseguir este reto, la OIT quiere potenciar el sistema multilateral, a través del fortalecimiento de las alianzas y el incremento de la coherencia en el sistema multilateral, y la integración de la Agenda 2030 y sus componentes de trabajo decente en las estrategias políticas nacionales. La Organización Mundial del Trabajo quiere también que el trabajo decente esté presente en las estrategias nacionales de empleo y en todas las reuniones entre representantes de trabajadores y empresarios.
Si se consiguen los objetivos de la OIT, estas iniciativas podrían marcar un cambio de rumbo y favorecer la justicia social en el mundo, a través de la erradicación de la pobreza y la reducción de las desigualdades más graves. Permitiría progresar hacia la sostenibilidad económica, social y medioambiental.
3. Las mujeres en el trabajo
Otro de los grandes retos a los que nos enfrentamos en el mundo laboral en este siglo es la igualdad de trato a las mujeres en el trabajo. La Iniciativa abarca cuatro ámbitos principales, identificados a través de investigaciones y consultas:
- La discriminación, incluyendo los estereotipos que obstaculizan el acceso al trabajo decente;
- Los bajos salarios y la disparidad salarial;
- La falta de reconocimiento, la distribución desigual del trabajo de cuidado y su subvaloración; y
- La violencia y el acoso.
A lo largo del año se desarrollarán numerosos estudios, informes e investigaciones sobre el papel de la mujer en el mundo laboral, sus condiciones, problemas y necesidades. Todos ellos han sido fruto del trabajo de diferentes comisiones y conferencias celebradas en los últimos años en muchos países y en las que la OIT ha impulsado los debates sobre el papel de la mujer en el mundo laboral.
La OIT busca una hoja de ruta transformadora a fin de dar un nuevo impulso en busca de la igualdad de género y la no discriminación por este motivo. Para apoyar esta reflexión, está prevista la publicación de un importante informe, El futuro de las mujeres en el trabajo, el Día Internacional de la Mujer 2019. Este informe reunirá los diferentes elementos de la Iniciativa, ofrecerá datos y análisis originales e identificará las políticas eficaces que podrían galvanizar una acción significativa para acelerar el ritmo del cambio.
4. La iniciativa verde
El Medio Ambiente y el Cambio Climático son dos de los problemas más graves a los que se enfrenta la Humanidad. Son problemas que afectan a la Economía y al desarrollo de empresas y trabajos, porque es necesario el desarrollo de modelos productivos y de consumo sostenibles.
En su último informe presentado a la 106.a reunión de la Conferencia Internacional del Trabajo en 2017, Guy Ryder, Director General de la OIT, dedicó particular atención al “Trabajo y cambio climático: La iniciativa verde ”. Guy Ryder analizó las consecuencias del cambio climático sobre el mundo del trabajo y las oportunidades que podrían surgir de la lucha contra el cambio climático, destacando a la vez la importancia vital de una transición justa para todos.
Para tal fin, la OIT seguirá fortaleciendo su papel como única referencia política sobre los vínculos entre el cambio climático, las estrategias de bajas emisiones de carbono y el uso eficiente de los recursos, por una parte, y el empleo, la protección social, la equidad y el diálogo social, por otra.
Para luchar contra el Cambio Climático la OIT propone a los Gobiernos, empresarios y trabajadores que trabajen para que cualquier decisión tenga como referente la transición hacia una economía más verde. Además, la Iniciativa Verde quiere que el desarrollo sostenible esté integrado en todos los ámbitos de acción de la propia OIT para hacer a la organización más respetuosa con el Medio Ambiente.
5. La iniciativa relativa a las normas
La Iniciativa relativa a las normas es una de las siete iniciativas del centenario que se aplicarán antes de la celebración del centenario de la OIT en 2019. Su objetivo es doble. Su finalidad es:
- mejorar la pertinencia de las normas internacionales del trabajo a través del mecanismo de examen de las normas, y
- consolidar el consenso tripartito en torno a un sistema de control reconocido.
La OIT lleva varios años trabajando en un programa que se encuentra en estos momentos en aplicación y que busca mejorar los procedimientos para el control, la evaluación y la toma de decisiones sobre las normas que afectan al mercado de trabajo en el mundo y busca que las normativas internacionales que regulan las relaciones laborales tengan un mayor peso en las legislaciones nacionales para avanzar en la justicia social y el trabajo decente. Para conseguirlo, la OIT se plantea dar mayor visibilidad a las normativas internacionales relativas al trabajo y asesorar a los gobernantes, representantes de los trabajadores y de los empresarios para que tengan en cuenta estas normas en sus acuerdos.
6. La iniciativa relativa a las empresas
Esta iniciativa está encaminada a lograr los objetivos de la OIT a través de la colaboración con las empresas. Para la Organización Internacional del Trabajo, la iniciativa privada tiene un papel decisivo en el crecimiento mundial, a través de la formación profesional de los trabajadores y la creación de riqueza.
La OIT se moviliza con las empresas a través de todos sus objetivos estratégicos y en todas las regiones del mundo, y trabaja con empresas de todos los tamaños, desde pequeñas y medianas empresas, hasta las más grandes multinacionales.
Con esta iniciativa, la OIT pretende conseguir un aprendizaje mutuo. Por una parte, la OIT aprenderá de las empresas y de los desafíos a los que se enfrentan y que pueden condicionar las relaciones laborales y, por otro, las empresas aprenderán de la experiencia de la OIT y de su capacidad de interpretación del entorno laboral en todo el mundo.
Esta iniciativa se materializará en un asesoramiento sobre políticas y prácticas correspondientes al trabajo de la OIT, el desarrollo de redes de empresas que trabajan por los objetivos de la OIT, desarrollo de conocimiento multisectorial sobre entornos laborales, apoyo a la implementación de acuerdos internacionales y el desarrollo de investigaciones sobre tendencias y experiencias relativas a la responsabilidad social corporativa.
7. La iniciativa sobre la gobernanza
Por último, la OIT ha iniciado un proceso de mejora de sus órganos de gestión encaminado a ampliar la participación de todos los miembros del Consejo en sus deliberaciones, en los procesos de toma de decisiones y de establecimiento del orden del día, así como incrementar la trasparencia a través de consultas regulares, y mejorar el seguimiento de las decisiones tomadas por el Consejo de Administración. Un conjunto de reformas fue adoptado en marzo 2011 y sucesivamente fue revisado en 2014 y 2015. La reforma se basa en cuatro pilares:
- Racionalizar la estructura del Consejo de Administración;
- Mejorar el mecanismo de fijación del orden del día;
- Incrementar la transparencia y el apoyo de parte de la Oficina a los mandantes tripartitos, y;
- Mejorar la presentación de los documentos y la gestión del tiempo.
En definitiva, la Organización Internacional del Trabajo tiene por delante nuevos retos para afrontar en este segundo siglo de vida que comienza en 2019. Lejos de ser un centenario para repasar lo realizado, el planteamiento de la OIT ha sido analizar estos 100 años de historia y extraer conclusiones que ayuden a avanzar en la construcción de un mundo más sostenible a través de unas relaciones económicas y laborales más justas, con el objetivo de conseguir trabajo decente para todo el mundo.